martes, 28 de febrero de 2012

“Nunca mis mañanas habían tomado café tan contentas dentro de su inmensa tristeza. Los cerros no habían crecido, el viento no se llevó nada y dentro de mi corazón no había más que espera y soledad bañada en esencia de amor que se transformaba en locura. ¿Después? Nada. Lo que importaba era el café, solo el café y como desayuno tu recuerdo.”
Nicté Toxqui

No hay comentarios:

Publicar un comentario