Cerca ya de medianoche, en esas horas en que todo se vuelve dolorosamente nítido o angustiosamente desdibujado.
domingo, 10 de junio de 2012
Yo, que los tributos los pago en sueños; que mis poemas predicen el futuro, que me hago madrugada, repito palabras, decoro el espacio, le doy sangre a las estrellas, y siento unas ganas terribles de visitar otros planetas.
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