¿Y si no es el indicado? ¿Y si se larga también como suelen hacerlo todos? ¿qué se llevará de mi? todos se llevan algo. ¡Malditos, malditos! Recuerdo cuando no le temía a estas cosas, cuando me entregaba, cuando pensaba que daban algo y les daba algo de mí a cambio. El "malo”, el ultimo se llevo lo mejor y me volvió añicos el corazón, me dejó un par de enseñanzas, no fue la mejor manera de aprenderlo, pero creo que fue la más efectiva. Aún no comprendo la facilidad con la que una persona te invade el mundo y luego como si nada, se va dejando todo patas arriba, dejando todo y a la vez nada. Gracias a "el malo", pude tener una lista enorme de las cosas que no quería hacer de nuevo, ni por error, y esa lista la encabezaba la esa dichosa palabra... "enamorarme". Sí, estaba en grande, con resaltador, y en frente en un paréntesis el argumento por el cual no debía hacerlo si es que me daban ganas de ignorarlo. Y así pasó durante un largo tiempo, lo llevaba casi que escrito en la frente. Pero después de un tiempo... lo conocí a él, y ahora me pregunto que querrá de mi, cómo espera que sea con él. Por primera vez después de un tiempo, no se si largo o corto, quiero querer a alguien, lo quiero querer a él y realmente, no me resulta complicado. Sabe hacerme sonreír, sabe entender lo que le digo, sabe pasar su mano por mi rostro, lo hace con ternura, con delicadeza, como si me quisiera... como si me quisiera de verdad. Se sabe comportar, sabe ser bueno.
Me vuelve idiota por momentos, me hace decir lo que estoy sintiendo y eso es lo que me asusta en verdad.
Me está haciendo olvidar que tengo una lista, es más, ya no se ni donde la puse la última vez que la quise recordar. No quiero que él me haga buscarla, si me lastima juro que me la  pego de por vida en toda la cara, de alguna manera tengo que dejar esta estupidez.
¿Qué sucederá si me enamoro? no sé por qué lo planeo tanto, supongo que se debe al miedo. Miedo a que me lastimen de nuevo, miedo a que finjan, que me mientan, a eso último, le tengo pánico. No soporto que me vean la cara de imbécil, ya lo soporté por mucho tiempo.
El se llevará algo de mí, estoy segura. Es más, si se fuese en este mismo instante... se llevaría mucho. No quiero que se vaya, no he pensado en su partida. En cambio, he pensado en como sería tenerlo conmigo ahora, más adelante. No es mucho el tiempo que llevamos juntos, pero ya empiezo a imaginar muchas cosas. Sus ojos tienden a prometerme un mañana con la mirada. Su pupila brilla y brilla cuando sonríe, me hace sentir especial, me hace sentir que le empiezo a importar. Y el empieza a notar que me importa. En realidad me importa y cuando lo descubrí, no supe como sentirme. Es como cuando descubres que estas envuelta en lo que tanto has temido. Ya estoy envuelta en él.
Me alienta saber que conoce mis miedos y todo mi pasado. No tan detalladamente, pero lo conoce. Y sé que también lo han lastimado, sé que le costará olvidar esa cicatriz, pero sé también que quiero estar para que no la recuerde tanto. Si el está dispuesto a borrar la mía, yo estaré dispuesta a pintar corazoncitos en la suya.
Me está haciendo tener manías de nuevo, como por ejemplo:
- Dormir con el celular al lado, y antes de cerrar los ojos, echarle un vistazo a la bandeja de entrada.
- Levantarme pensando en alguien.
- Sonreír como una tarada con tan solo escucharlo al otro lado del teléfono.¡Y olvidar que existe esa maldita lista! Y me devuelve las preguntas al revés... ¿Y si es el indicado? ¿Y si se queda como no lo ha hecho ninguno?
¿Qué tomará de mí para guardarlo siempre? 

Lf