Cerca ya de medianoche, en esas horas en que todo se vuelve dolorosamente nítido o angustiosamente desdibujado.
viernes, 26 de octubre de 2012
Hay días en que siento una desgana de mí, de ti, de todo lo que insiste en creerse y me hallo solidariamente cretino apto para que en mí vacilen los rencores y nada me parezca un aceptable augurio...
No hay comentarios:
Publicar un comentario