Cerca ya de medianoche, en esas horas en que todo se vuelve dolorosamente nítido o angustiosamente desdibujado.
martes, 12 de marzo de 2013
Yo no soy buena compañía; hablar no me sirve para nada. No quiero intercambiar ideas, ni almas. Soy un bloque de piedra que se basta a sí mismo. Quiero quedarme dentro de ese bloque, sin que nadie me moleste. Soy así desde siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario