sábado, 4 de enero de 2014

Solíamos hablarnos millones de palabras con solo una mirada, leernos la mente con solo una sonrisa, y estoy segura que la quería -la quiero- como solo se le puede querer a esas personas que te tocan el corazón y no te lo devuelven.
Y aunque parecen siglos desde esos lindos amaneceres, la parte de ella me dice que le grite y le recuerde que aun sigue dentro de mi. Cuando me lees, quiero que te leas también a ti, de eso siempre se ha tratado lo nuestro, ¿verdad?.

¿Quien es esa Dana? ¿soy yo? No creo que lo sea, no te odio, y estoy segura que nunca lo haría.
Dibi

No hay comentarios:

Publicar un comentario